Jesús es el HIjo de Dios, quien vino a la Tierra en forma humana - sintió tristeza, alegría y soledad - y entregó su vida en una cruz para perdonarnos de nuestros pecados.
¿Por qué Jesús dio su vida por nosotros? Porque todos pecamos. Romanos 6:23 dice: "La paga que deja el pecado es la muerte, pero el regalo que Dios da es la vida eterna por medio de Cristo Jesús nuestro Señor".
Conocemos la historia de Jesús aquí en la Tierra en los evangelios de Mateo, Marcos, Lucas y Juan. Luego de morir en la cruz, al tercer día resucitó y nos reconcilió con Dios y nos dio los beneficios de ser llamados también hijos e hijas de Dios. ¡Ya no tenemos que pagar por nuestras faltas porque Cristo Jesús pagó el precio!
¿Qué debes hacer para ser hijo o hija de Dios? Romanos 10:9-10 dice: "Si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios le levantó de entre los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para ser justificado, pero con la boca se confiesa para ser salvo".
Si tú lo crees, has esta oración: Querido Jesús, reconozco que moriste en la cruz por mis pecados y que al resucitar me diste el beneficio de ser llamado hijo de Dios. Por esto te acepto en mi corazón. No quiero seguir cargando con el peso de mis fallas; porque Tú ya las llevaste en la cruz. Gracias por salvarme. Amén.
¡Felicidades! Bienvenido a la familia de Dios. Te animamos a que te comuniques con nosotros. Queremos ayudarte a dar tus siguientes pasos. La vida es demasiado dura ya como para que la vivas solo. Necesitas una familia espiritual.
A la edad de 7 años, sintió el llamado de Dios en su corazón a pastorear. A sus 12 años comenzó su liderazgo apasionado por ayudar al necesitado; sin temor a tomar riesgos, después que fuera para alcanzar uno más para Jesús. A lo largo de su juventud temprana, sirvió en su iglesia local y a las comunidades cialeñas; creando una confra cristiana en la escuela superior y en la universidad, siendo voluntario para la Cruz Roja Americana Capítulo de Puerto Rico, entre otras formas.
A la edad de 30 años, con la bendición de su pastor local David Colón, el pastor Ezequiel comenzó lo que hoy es la Iglesia de la Comunidad; una Iglesia para personas que no asisten a una. Dios le inquietó a "edificar Su Iglesia" y Dios proveerá. Hasta el día de hoy, así ha sido.
El pastor Ezequiel posee un Grado Asociado en Cómputos en el American University, Grado en Artes Ministeriales en el Colegio Pentecostal Mizpa y una Maestría en Teología por Vision International University con sedes en Ramona, California, USA. También es certificado como profesional de la práctica de teo-consejería en comunidades terapéuticas; así como también es certificado por Life Innovation, Inc. en Minneapolis para edificar matrimonios sólidos. De igual modo es el representante oficial en Puerto Rico y el Caribe del ministerio del pastor Rick Warren; autor de "Una vida con propósito".
A pesar de contar con todos estos grados, el pastor Ezequiel es una persona sencilla y su familia es su mayor estímulo.
La Iglesia de la Comunidad de Ciales, Puerto Rico, nace el 6 de enero del año 2006 con la intensión de hacer la diferencia; por medio de hacer realidad el Gran Mandamiento (Mateo 22:37-40) y la Gran Comisión (Mateo 28:19-20). Como Iglesia, buscamos hacer balance en las cinco (5) áreas que Jesucristo encomendó a su Iglesia: adorar únicamente a Dios, servir a otros, educar a nuevos creyentes, tener comunión unos con otros y dar las Buenas Nuevas a los aflijidos. Desde nuestros inicios, intencionalmente buscamos balancear estas áreas en cada persona y como congregación.
Al día de hoy, enseñamos a nuestros visitantes y a la congregación a amar y adorar a Dios por medio de un estilo de vida. Enseñamos que para adorar a Dios no necesitas saber cantar o tocar algún instrumento; le adoras con tu vida. Además, enseñamos a amar a Dios y a otras personas a través del servicio. Contamos con 33 Ministerios o áreas de servicio (y contando) en donde las personas pueden dar de su tiempo, habilidades y talentos al servicio de Dios y otras personas. En adición servimos de modelo para otras Iglesias y amigos pastores en nuestro Puerto Rico sobre cómo hacer realidad el Gran Mandamiento y la Gran Comisión.
Nuestro Instituto para el desarrollo de la vida tiene el compromiso de edificar creyentes maduros y balanceados que sean semejantes a Jesús. De forma paralela, insistimos en la necesidad de tener amigos con quienes podamos tener comunión. A medida que la Iglesia se hace más grande, buscamos que se haga más pequeña en grupos pequeños.
Por otro lado, Operación Esperanza O|E identifica necesidades en nuestra comunidad y en otros países hermanos, para que de alguna forma sean suplidas. En nuestros 18 años de existencia, hemos invertido más de $1.9 millones en asistencia humanitaria. No solo en Puerto Rico, sino también en República Dominicana, Haití, Cuba, Las Bahamas, Estados Unidos, México, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Colombia, España, Francia, Líbano y Afganistán.
No tan solo eso. Durante el terremoto del 2010 en Haití, la Iglesia de la Comunidad de Fontamara en Puerto Príncipe, sirvió como refugio y centro de distribución de ayuda. ¡La Iglesia de la Comunidad es mucho más grande de lo que podemos ver!
No queremos ser mejores que otras iglesias; queremos hacer la diferencia.
Somos una Iglesia de personas rotas e imperfectas que tienen luchas y que buscan ser mejor en todas las áreas de su vida. Somos una Iglesia para personas que no asisten a alguna Iglesia.
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